A primera vista, debe enfatizarse que la calidad del piso está determinada por una escala que va desde AC1 a AC5. Si bien las clasificaciones AC3, AC4 y AC5 indican una calidad respetable a nivel de producto, se deben evitar clasificaciones más bajas. Es importante tener en cuenta que una clasificación AC3 es suficiente para uso residencial o de bajo tráfico, mientras que las clasificaciones más altas son para locales comerciales con alto flujo de tráfico.